La iluminación en la moda y en el Retail
La iluminación de una tienda y su diseño es una de las herramientas principales para lograr ciertos efectos que pueden ser de gran utilidad, ya sea para enfatizar la atención sobre ciertos productos que para crear diferentes ritmos en el espacio.
La luz, naturalmente, nos atrae y cuando estamos en un ambiente con poca luz, nuestro sistema de alerta tiende a desactivarse, lo cual ayuda a nuestro cuerpo a relajarse.
Por el contrario, en un ambiente con altos niveles de luz nos activamos y ponemos en movimiento.
¿Qué efecto nos produce la luz?
En pocas palabras la luz tiene la capacidad de activar o desactivar ciertas emociones, y dependiendo de como esté implementada puede ayudarnos a construir distintos tiempos de permanencia en cada lugar al interior de una tienda, por ello es importante tener en cuenta que si mantenemos los mismos niveles de iluminación en todo el espacio, el ritmo de compra será monótono y aburrido.
¿Pero qué son los niveles de iluminación?
En términos sencillos, los niveles de iluminación pueden ser generales o puntuales. Si distribuimos las luminarias correctamente, podemos crear espacios donde la luz general ayude a los usuarios a desplazarse cómodamente, mientras una luz puntual o localizada nos ayuda a redirigir su atención hacia los espacios o productos que queremos destacar.
Además, al día de hoy existen una gran variedad de dispositivos que nos permiten usar distintos colores, tonos y temperaturas para lograr una gran variedad de efectos y poder reconfigurar el espacio según nuestras necesidades.
¿Qué ambiente queremos generar en nuestra tienda?
Lo más importante antes de elegir la iluminación es conocer qué ambiente queremos generar en nuestro espacio comercial.
Tenemos que, ante todo, tener clara nuestra imagen corporativa, ya que las luces tienen que ir acorde a ella. La iluminación es otro atributo que describe la personalidad de una marca.
-“La iluminación de nuestros proyectos tiene que estar bien planificada. Una estrategia comercial apoyado con un plan de iluminación bien ejecutado, aumenta las posibilidades de venta.”-
José Luis.
Si queremos invitar nuestros clientes a entrar al interior de nuestro espacio, tenemos que asegurarnos que la tienda se visualice correctamente desde fuera. La iluminación está muy relacionada con dos aspectos fundamentales:
- El producto que vendemos
- Lo que queremos transmitir a los consumidores
La iluminación nos sirve como reclamo para atraer al cliente a nuestro escaparate o para destacar un artículo respecto al resto. Por ejemplo, un escaparate oscuro o con muchos reflejos dificultará que el consumidor pueda ver con claridad el producto.
Además, no olvides que la iluminación es una gran oportunidad para crear un diseño original para la decoración de tu espacio.
¿Iluminación fría o cálida?
Para elegir los tonos de la iluminación del espacio tenemos que conocer la psicología de los colores y estos siempre han de ir acorde con los diferentes elementos del espacio y con la personalidad de la marca.
La iluminación puede ser fría o cálida, en función de la temperatura de color. Utilizar una u otra dependerá de las zonas a iluminar.
Por ejemplo, emplearemos una luz cálida en aquellas zonas donde el cliente tenga que pasar más tiempo. Y una luz fría en zonas donde necesitemos más claridad, como en las zonas de caja.
Podemos aprovechar la iluminación para cambiar de aspecto al espacio cuando haya nuevas tendencias. Así dinamizamos y adaptamos nuestra tienda sin tener que hacer reformas de gran dimensión.
¿Cómo elegir la iluminación para tiendas?
Es importante elegir la luminosidad general de la tienda, según el ambiente que queramos producir será más o menos luminoso. En las zonas de exposición la luminosidad tiene que ser adecuada, para que el cliente no se deslumbre al mirar el producto.
Los sistemas de iluminación LED son sin duda, el presente, el futuro, principalmente por su eficacia y rendimiento. Hoy en día es el tipo de luz que permite un bajo consumo a la vez que una alta eficiencia.
A la hora de escoger los tipos de lámparas hay que tener en cuenta la reproducción cromática que ofrece, es decir, la capacidad que tiene de reproducir fielmente los colores de los productos. Es un aspecto fundamental respetar los atributos de los productos, ya que si el cliente compra un artículo en la tienda y cuando llega a casa es de un color diferente podría llegar a sentirse engañado.
Otro aspecto a tener en cuenta en el momento de iluminar el espacio, es que la luz crea sombras y cuantas más lámparas tengamos, más sombras generamos.
Cuanto más puntual sea la fuente de luz, más nítida será la sombra y al contrario con las fuentes de luz difusas.
Normalmente, la iluminación general es difusa y cuando resaltamos se suele utilizar una luz puntual. Otra opción es tener expositores retroiluminados para eliminar las sombras y resaltar también los productos.
Para cada espacio su iluminación
En cada tienda existen diferentes espacios, desde los probadores hasta las cajas o los expositores.
-“…crear espacios es bonito y a veces necesario, pero evita iluminar la nada.“-
José Luis.
Todas estas áreas hay que tenerlas en cuentas a la hora de pensar en un diseño de iluminación, ya que cada zona necesita su propia luz en función del su objetivo.
Escaparate
Es el primer punto de contacto con el cliente. En los escaparates lo más habitual es usar focos y carriles de focos para destacar la forma y textura de los productos expuestos. Para crear diferentes atmósferas se emplean reguladores de intensidad.
Especialmente destacar la comparación de maniquíes vestidos con una iluminación que realce el estilismo y que facilite la rápida atención del cliente. A unos maniquíes, en la misma circunstancia, cuya iluminación no este equilibrada, sea excesiva o en su defecto, una iluminación ausente.
Estanterías
Una vez en tienda, es de vital importancia dirigir la atención del cliente a los productos de las estanterías. Por lo tanto, es una de las zonas de tienda donde la iluminación es más relevante y debe ser de gran calidad.
Probadores
Es un espacio decisivo para la compra, por lo que la luz debe ser favorecedora. Para ello, se utilizan luces en los laterales de los espejos. Este tipo de luz ayuda a reducir las sombras que provocan los focos superiores. También se recomienda que sea una luz cálida, más cómoda. Y, si queremos ahorrar energía, se pueden aplicar sensores de movimiento para que la luz solo se encienda cuando alguien esté en el interior del probador.
Cajas
Se recomienda una iluminación dinámica para hacer más agradable la espera.
En definitiva, la iluminación en tienda tiene una funcionalidad muy estratégica y va más allá de simplemente iluminar el exterior y el interior del establecimiento. Si estás pensando en una nueva estrategia de iluminación para tu espacio comercial, no dudes contactar con un profesional del sector para que pueda asesorarte.
Fuentes: lighting.philips.es; caad-design.com; marcelaseggiaro.com; heca-group.com; studioescaparatismo.es; joseluisledesma.com;