Moda y sostenibilidad
Hoy en día, cada vez son más los diseñadores y las marcas de moda que se suman al gran cambio que está produciéndose en la industria textil expandiendo las fronteras de la moda sostenible.
Como respuesta a los malos hábitos del fast fashion, en las ultimas décadas el mundo de la Moda y del Retail, ha empezado una revolución sostenible.
El slow fashion busca reducir la contaminación, usar materias primas sostenibles, reciclar, optimizar los diseños para evitar desechos y brindar las garantías necesarias a los productores y trabajadores.
Además, la moda sostenible apuesta por una economía circular, es decir, un nuevo modelo de diseño y producción para que las prendas puedan volver a ser recicladas.
Los pioneros de la revolución sostenible
Los esfuerzos para avanzar hacia un modelo de moda mas eco-friendly lo podemos apreciar en grandes firmas, que fueron las pioneras de este movimiento, como Vivienne Westwood o Stella McCartney (foto destacada del blog). Dos de las personalidades mas comprometidas con el medio ambiente.
Vivienne Westwood colabora desde 2010 con Iniciativa Moda Ética para promover el activismo y conseguir mejoras sociales en países en vías de desarrollo.
Stella McCartney con la creación de prendas elaboradas con materiales reciclados, enseñó que la moda ética es una posibilidad ahora totalmente necesaria. Sin duda, su actividad ha sido un ejemplo para muchos marcando un antes y un después en la industria del slow fashion.
Con el lanzamiento de la Carta de la Industria de la Moda para la acción climática en 2018 el sector textil ha dado otro paso significativo para hacer frente al cambio climático.
La Carta firmada por marcas como Adidas, Burberry, Esprit, Guess, Gap Inc. Hugo Boss, H&M Group, Inditex, Kering Group, Levi Strauss & Co., Puma SE, Target, ha fijado como objetivo reducir las emisiones en un 30% para 2030 y dejar de producirlas por completo en 2050.
De hecho, son muchas las firmas de lujo que ya han decidido demostrar que no es necesario explotar el planeta para la creación de sus colecciones. Algunos de los grandes nombres de la moda, Armani, Gucci, Ralph Lauren, Tommy Hilfiger y Hugo Boss, entre otras, ya renunciaron de forma definitiva al uso de pieles de animales. Mientras, marcas del grupo LVMH, como Louis Vuitton, Dior, Celine o Fendi se han concentrado sobre todo en el packaging, que ya ha sido reducido hasta en un 60%.
Crear y mantener un equilibrio entre la producción y el respeto para el medio ambiente es posible.
El concepto de moda sostenible y respetuosa no puede existir sin hábitos de consumo más responsables que nos convierten en consumidores que no aspiran a consumir más, sino a consumir mejor.
Escaparatismo sostenible
Si hablamos de moda sostenible hablamos también de diseño sostenible, fundamental para la creación de piezas que cumplan con las necesidades de los clientes, sin comprometer el medio ambiente.
Lo mas importante que podemos hacer como profesionales del Escaparatismo es crear diseños de forma responsable, teniendo en cuenta el impacto social, ambiental que conlleva, buscando siempre la máxima calidad en los materiales. Ser sostenible no significa renunciar al estilo.
Es necesario plantear nuevas formas de usar productos y materiales con los cuales podemos crear y generar espacios impactantes. Materiales como la madera recuperada, madera ecológica o reciclada, plástico reciclado, tipos de metales como el aluminio (no tóxico y reciclable 100%) tipos de cartones, tejidos o el uso de impresiones 3D que dosifican la cantidad necesaria sin excesos, pueden ser grandes aliados para crear unos escaparates muy atractivos y sostenibles.
Las marcas de moda y las fabricas de decoración sostenibles podrían doblar, como mínimo los beneficios a largo plazo, de las que no lo son.
De hecho, entre otras medidas, las fabricas de decoración incluirían un servicio de recogida gratuita de la decoración utilizada por los clientes para su reciclado, la utilización de materiales no dañinos para el medio ambiente, la optimización en el proceso del diseño para producir los elementos indispensables, control de packaging y la planificación de la producción.
